Magia/Poesía

Natalia López

Unas dudas enormes

Tenía una panza enorme
dudas enormes y
una fantasía también
enorme
sobre
lo que podía llegar a ser
la maternidad.
Como un oficio
que no se aprende
nunca
pero que se ensaya
sin tiempo
cuando ya estás
ahí
y no podés hacer otra cosa que
ocuparte
(no preocuparte).
Los últimos meses tenía también
miedo
y le preguntaba a mi mamá
si lo iba a querer
a mi propio hijo.
Se rió
al principio
pero después
con la seriedad que merece
el tema
dijo: -Sí,
quedate tranquila.

 

Mi nene

Se quiere vestir solo, comer solo,
hacerse la chocolatada.
A eso tenía que llegar
y lo hace a medida que crece y con el orden
que imponemos cuando no nos olvida
nuestra propia vida
que es compartida pero
hay asuntos que no lo incluyen,
que estaban de antes.
Costumbres, hábitos, rutinas
que hubo que modificar
para llevar adelante esto
que necesita:
no mirar muchos dibujitos
no acostarse tan tarde
hacer actividades, salir
ver a la familia, estar con nosotros
participar en el amasado de la pizza
saber que el horno no se toca
lavarse los dientes en lo de la abuela
desterrar a la tablet que lo aliena
charlar, charlar
que entiende todo
escuchar, dejarlo hablar
hacerlo sentir seguro
hacerlo sentir querido
que ponga la mesa,
que riegue las plantas
que aprenda lo que es el respeto
que aprenda a divertirse con su imaginación
que aprenda que a veces hay que bancarse un no.
Lo veo mimoso, con autoestima
lo veo habilidoso, activo
lo veo interesado por las cosas que pasan a su alrededor
atento y considerado con los demás.
En el jardín dijeron que duerme mucha siesta
y que se despierta de mal humor
también dijeron que es un nene educado y cariñoso.
¿Con cuál versión de vos mismo te quedarás?

 

Skype

Las canciones por Skype funcionan,
me hacen sentir segura.
Respondés sólo a eso y está bien.
Canto para confirmarlo.

 

Delia

Nunca me contó por qué le pusieron ese nombre,
nunca me contó demasiadas cosas,
no es una gran narradora de su vida,
y sin embargo una vez
la llevé de viaje a su pasado.
Fuimos ella, Flor y yo
1.000 km en auto hasta Misiones
1.000 km hasta Oberá, su ciudad natal.
Y ahí algo contó
y ahí
algo vi:
que sus parientes vivían
detenidos en el tiempo
que ya no tenía nada que ver con eso,
ni con las gallinas y su forma de matarlas,
apretando bien el pescuezo.
O con la opulencia de una tía
que solo le recordó
el hambre que ella y su hermana muerta pasaron
por el orgullo de su padre
y la inacción de su madre.
De ahí sacó su manía por el ahorro,
de ahí sacó la bondad y la culpa,
de ahí salimos nosotras
a las que siempre nos inculcó
la hermandad por sobre todas las cosas.
Gritabas mucho,
incluso cuando me caía.
En esos momentos pensaba
ya me duele el golpe como para, además,
bancar tu reto.
Y me prometí que
cuando tuviera un hijo
no iba a gritarle nunca.
Ahora
lo único
que puedo pensar
es en todo lo que no sabía que habías hecho
para que yo sobreviviera en este mundo.

 

Autobiografía

Soy los ojos verdes que ves.
Nací en 1980, casi millenial pero no.
Estoy entre una hermana nacida en el principio de una dictadura
y otra nacida al final de una primavera.
Mi madre está viva y su espíritu es joven,
mi padre está vivo pero sus olores son ya los de un viejo.
El día que vi la luz, el edificio Cóndor se derrumbó en la esquina;
caía una lluvia torrencial y según el relato de mi madre:
nadie me prestaba atención, todos miraban por la ventana.
La lluvia y los escombros,
el espectáculo del morbo.
A veces me pregunto si es por eso que necesito tanto amor
si ese preciso instante es el origen de mi inmadurez
si todo lo que me pasó hasta ahora no estaba
desde ahí
predestinado.

 

 

Natalia López nació en Buenos Aires, en 1980. Es periodista (TEA) y Lic. en Ciencias de la Comunicación (UBA). Algunos de sus poemas forman parte de la antología Apología 3, de la Editorial Letras del Sur. La suerte en el error, de editorial Santos Locos, es su primer libro. Participó en los talleres literarios de Fabián Casas, Santiago Llach y Clara Muschietti. Escribe cuentos y poesía.

*Estos poemas son parte del libro La suerte en el error, publicado en diciembre de 2018 por editorial Santos Locos. @santoslocospoesia @natyalopez

Ilustración: Max Gómez Canle «Coloso», 2016, óleo sobre tela.