Nostalgia del futuro

la anti-foto

por Lu Puiggrós*

La anti-foto. Lo que probablemente no nos animamos a mostrar y queremos esconder.
Yo me ví, y lloré. Y me mueve todo el piso mostrar esta foto.
Pero es necesario.
Hablemos del cuerpo atravesado por la maternidad. Hablemos de cómo está desnaturalizado que somos transformadas de adentro para afuera y de afuera para adentro cuando un ser humano nace de nosotras.
Y no es solo la gestación, el parto y el post-parto, es la lactancia, es la post-lactancia, es el «después» eterno y el cansancio de criar.
Las estrías, la piel colgada, las tetas arrugadas, las cicatrices, la vagina floja, las ojeras, la espalda encorvada, la cintura hundida. Y en la tele te muestran como «triunfante» a alguna modelo de turno que es vanagloriada por que en una semana después de parir ya recuperó su figura y está como si nada hubiera pasado.
COMO SI NADA
HUBIERA
PASADO.
¿Puede haber algo más terrible que la negación total de TODO LO QUE NOS PASA cuando somos madres? ¿Fingir que podemos volver a ser las de antes? Apegarnos a la imagen de lo que fuimos? ¿Sentir que perdimos «nuestra juventud» y «nuestra figura» por que tuvimos hijes? Y lo físico es tan solo una de las aristas, el abanico de estigmas de la maternidad es amplio. Pero hoy yo siento hablar del cuerpo, por que me interpela, por que toca fibras hondas. Por que me veo y no me parezco a la imagen que fue construida en mi cabeza de un cuerpo estéticamente bello, ahora que soy madre. Porque acompaño mujeres y veo cómo les cuesta verse, cómo se rechazan, cómo desean tener otro cuerpo. Porque poco se habla de cuerpos maternos como cuerpos que crean, nutren y sostienen vida y por ello deben ser honrados con todas las marcas que este proceso pueda traer. Mucho se enaltece a la panza y el cuerpo gestante, pero después? Sentimos la presión de volver a como estábamos y que no se note nuestra maternidad. Llegamos incluso a sentir que si descubren que somos madres, podemos dejar de ser deseables y atractivas, sexualmente activas y con deseos de explorar y compartir.

Mi trabajo personal hoy es resignificar todo vestigio que me recuerde que soy una potencia creativa. Es ver cada parte de mi, atravesada y modificada por el acto de maternar, que no es ni mas ni menos que GESTAR, PARIR Y ALIMENTAR UN SER HUMANO CON MI CUERPO, con amor y cariño, como memorias del acto mas poderoso de mi vida. Y no como algo que me disminuye, como algo que me separa, que me aleja, que me avergüenza, algo por lo cual tengo que esconderme en las sombras con miedo a no ser aceptada.
Abrazar que la vida pasa, y pasa a través nuestro y que en eso, reside una belleza inmensa.

>>>

Lu Puiggrós
Se viene una propuesta con Ceci de @somosciclicas donde ademas de nuestras marcas físicas, resignificamos todas las marcas de la maternidad, todo lo que se levanta, todas las heridas. Desde el sentirnos rotas, creamos, DESDE LAS ENTRAÑAS. Un taller online de cinco encuentros con mucho poder, que arranca en noviembre. Para más info https://linktr.ee/lu.puiggros