Poemas del embarasco
Nena de Sandro
A veces sí,
a veces no.
hoy por ejemplo un desastre
consulto en el chat
es normal?
sí, a veces el flujo es desbordante
ay boluda menos mal que me dijiste
hoy me siento una Nena de Sandro.
Napalm in the morning
no entres, estoy en call aunque no lo escuches
pero es que me tenés que firmar estos papeles
no puedo, cerrá bien la puerta
dame unos 15 que ya te atiendo
Quién hubiera dicho que los estrógenos eran tan inflamables?
Uber Ubre
85
90
95
100
105
105!!! cómo puede ser?
para mí estas hermosa
salí de acá, estamos comprando corpiños en el Coto
si no me llega a entrar el 105 voy a tener que atar dos tuppers con un piolín.
Pato
qué es ese olor?
se me nubla la mente
se me para el corazón
los ojos se abren como gato cruzando la calle
es inminente
correte
correte!!!
vas a vomit?… uh.
Talón de aquella
Pies para qué los quiero
si tengo dos empanadas para tropezar
mi amada ojota me ha traicionado
la otrora compinche chancleta
compañera de los mejores momentos
de las mejores estaciones del año
con quien sólo viví momentos de placer
de ocio
de eventos décontracté
hoy me mostró su lado oscuro
hinchado
estrecho
pesado
rechazó mi pie preñado
por gordo
por retentivo de líquido
por circular
Y en las fauces de las Crocs me ha tirado
Se rompe pero no se dobla
Universitaria
atleta
empoderada
eso era antes
ahora dependo de mi príncipe azul
ese que me ata los cordones
que me sostiene el pelo en el baño
que pesca las zapatillas debajo de la cama
que prende el horno
mucha UBA, mucha UBA
pero ahora grito desde la ducha
pidiendo una mano que me venga a rescatar.
Fluídos
Cosas que fluyeron en mi vida desde el 22 de octubre de 2020. En orden de aparición:
Líquido amniótico, de la bolsa que rompí a las 21 hs del día 21.
Anestésico local, que entró en mi cuerpo desde la columna vertebral y viajó por ella hasta mi pelvis y piernas.
Sangre que corrió por la incisión que me hicieron en el monte de venus.
Líquidos varios con los que Elías vino al mundo.
Placenta que sacaron ates de suturar la herida.
Lágrimas de felicidad, emoción y confusión cuando se bajó la tela verde y nos lo mostraron.
Grasa o vérnix caseosa que impregnó mi bata cuando lo apoyaron en mi pecho, a las 0:23 am.
Agua que corrió por su cuerpito cuando lo lavaron.
Tinta negra que le pusieron en su pie y en mi pulgar derecho y que ninguno de los dos entendió lo que estaba pasando.
Tramadol que tomó mi cuerpo y mi mente por una noche maravillosa de alucinaciones suaves y sueño tranquilo. El último sueño tranquilo desde ese entonces.
Meconio que eliminó al día siguiente y que limpiaron las enfermeras, luego el papá. Yo no porque saqué carnet de puérpera.
Calostro que apareció de repente para alegría de la puericultora y supongo que también del bebé.
Pis que hice con ayuda al principio y sola después.
Y una flatulencia sonora que fue lo desencadenó el alta médica a las 72hs, curioso requisito ineludible para irse de la clínica.
Nafta que nos trajo rápidamente a casa, un sábado al mediodía.
La leche, el amor y las emociones descontroladas vinieron después, en casa y ya más tranquilos conociéndonos los tres.
Plegaria con un niño prendido
Cuando pasés por acá
alcanzame el control remoto
o mal acompañada con esos hombres
vestidos con los peores textiles del país
también alcanzame ese trapito,
no, ese no, el otro eso es una de mis bombachas
vení
vení
que ya me senté y me olvidé la taza en la cocina
tráemela
y de paso algo dulce
cuanto antojo de algo dulce
será para saborizar la leche?
Cuando pasés por acá
no te olvides de acomodarme los almohadones
no puedo girar a la derecha
soy Zoolander cicatrizando
si podés, bajá también la persiana
a ver si tengo suerte y puedo dormir la siesta
vení
vení
ya fue, dejá.
Se durmió.
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Ella//Julieta Moreno. Nací en Buenos Aires. Soy abogada y traductora pública. Antes de la pandemia dividía mi vida entre Buenos Aires y Mendoza donde tengo un pequeño olivar que administro. Ahora hago todo por whatsapp (poda, fertilización, esperemos que pueda ir a la cosecha) y desde mi casa trabajo como abogada. En la otra parte de mi casa Daniel trabaja como contador. Juntos tenemos a Elías. Escribo hace algunos años, siempre textos cortos porque me cuesta sentarme a escribir.
Ilustración// Sally Hewett, «Feast of Venus», escultura, Reino Unido. Fuente: https://www.saatchiart.com/